domingo, 1 de enero de 2017

Libertad para informar

(AZprensa, Editorial) En el año 2003, cuando trabajaba en la industria farmacéutica, puse en marcha un diario digital llamado “AZprensa” que sorprendió a todos al ser un caso único y que nadie se ha atrevido a repetir: un diario informativo elaborado por un laboratorio farmacéutico en el que se daban noticias de todo lo relacionado con la salud... incluso noticias de otros laboratorios y sus respectivos fármacos. Tal osadía tuvo la recompensa de la credibilidad del público (cuando una empresa edita una publicación donde sólo habla de lo suyo, la credibilidad es nula, atufa a autopropaganda) y de su constante incremento de audiencia que llegó a situarlo como el segundo diario digital sanitario más leído de España, sólo por detrás de Diario Médico.

En 2007 dejé aquella compañía y en 2009 AZprensa dejó de editarse. Poco después, en 2011 abrí este espacio informativo con formato de blog al que llamé –en memoria de aquél proyecto único y personal- “AZprensa” aunque sólo me limitaba a incluir algunas informaciones y noticias sin más pretensión que la distracción personal. Al comenzar el año 2016 decidí dar regularidad diaria a las noticias para que todo aquél lector interesado en el mundo de la salud tuviese a su disposición un nuevo medio de información que –aun publicando sólo una o dos noticias cada día- le brindase ese soplo de aire fresco que es la “información independiente” (un bien realmente escaso).

En efecto, todos los medios de comunicación dependen del dinero (publicidad, subvenciones, accionistas, etc.) para subsistir, y nadie da dinero a cambio de nada. Por consiguiente los medios de comunicación están “vendidos” a sus fuentes de financiación y no pueden ser imparciales. Unos con ideología política muy clara, otros con intereses empresariales evidentes... ninguno puede publicar de forma libre porque saben que “no se puede morder la mano que te da de comer”, como dice el refrán, y así siguen al pie de la letra la “línea editorial” que rige su medio de comunicación.

En este caso, “AZprensa” sólo depende de su único autor, un comunicador con más de 40 años en la información sanitaria pero... ya jubilado. “AZprensa” no se edita, pues, por dinero, ni por complacer a nada ni a nadie, sólo por el puro placer de escribir y compartir información y puntos de vista, de contar en ocasiones las noticias de una forma que otros no se atreven a hacer para no herir la susceptibilidad de sus financiadores. “AZprensa” sólo depende, en definitiva, de mi ilusión por seguir escribiendo pero ahora de una forma totalmente independiente ya que no que debo rendir cuentas a nadie, sólo a mi conciencia y a mi deseo de compartir este ejemplo de periodismo personal e independiente.

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