(Diario El Inefable) El consentimiento informado se basa en una
relación de reciprocidad entre el paciente y el médico. Se define como la
relación libre, voluntaria y consciente de un paciente, manifestada en el pleno
uso de sus facultades después de recibir la información adecuada con tiempo
suficiente y claramente comprensible, para que tenga lugar una actuación
(procedimiento diagnóstico o terapéutico) que afecta a su salud.
A juicio del oncólogo Antonio Antón, el hecho de atender a
pacientes cada vez más autónomos en sus decisiones y mejor informados ha
revolucionado positivamente la relación oncólogo-paciente. La
corresponsabilidad del paciente cada vez está cobrando más protagonismo en las
consultas de oncología y, en este sentido, el consentimiento informado suscita
cada vez más interés y debate entre los profesionales sanitarios y los
pacientes. Es, quizás esta especialidad, la que más de cerca haya de
enfrentarse con problemas de consentimiento informado.
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